jueves, 22 de diciembre de 2011

tiempos modernos. nicanor parra: catastrophe and the cure

Atravesamos unos tiempos calamitosos
imposible hablar sin incurrir en delito de contradicción
imposible callar sin hacerse cómplices del Pentágono

Parra, Nicanor. Chistes par(r)a desorientar a la (policía) poesía. Visor. Madrid. p. 127

jueves, 10 de noviembre de 2011

rastreos por mis lindes: ryan adams y tomás segovia

Tendría que aceptar que me reprochen
Si es que puede nacer ese reproche
Que siempre haya esperado mucho más que buscado
El amor la alegría la dicha el cumplimiento
Que nunca haya buscado aunque lo haya esperado
Pertenecer a nada

Segovia, Tomás. Rastreos por mis lindes

sábado, 15 de octubre de 2011

the day is coming

"Tres cosas anticipan el tiempo por venir, el sol, el sábado y el tashmish"

El Talmud en Agamben, Giorgio (2011), "Hambre de Buey. Consideraciones sobre el sábado, la fiesta y la inoperosidad" en Desnudez. Anagrama. Barcelona.

viernes, 7 de octubre de 2011





- ¿Por qué sigo bailando?

- Para compartir (bailar) nuestro daños


lunes, 19 de septiembre de 2011

le gai savoir: the only moment we were alone

“Así he pasado la mitad de nuestra vida en la calle en el metro en esa desesperación que si se hundiera, finalmente, en mi letargo, en mis sueños, sólo podría compararse a la prisión a la vida punitiva, una demencia donde olvidaría incluso lo que hubiera perdido. Creo que nunca me he despertado sin gemir, un profundo gemido, alterado de toda la justicia de la noche. A veces el sentimiento era tan fuerte que persistía incluso cuando abría los ojos y entonces tú me preguntabas que me sucedía y yo no podía responderte creyendo que era la bruma de mis pesadillas la que oscurecía todavía mi mirada y debatiéndome en los recuerdos enredados de las sombras o bien sabiendo que relatarlo no conseguiría explicar nada yo desviaba la conversación hacia otro tema hacia lo que habíamos hecho o haríamos. Así me guardaba para mí ese cuasi-presente ese desgarro profundo como un dolor que escondemos. Cuando era joven, si que explicaba mis sueños pero ya no lo hago. Esa oscura puerta de la existencia que invade cada vez más la vida de la vigilia de mi mismo silencio haciéndome dudar de todo lo que me rodea. Y sobre todo de nosotros, de lo que nos hacía ser, decir “nosotros”. Un “nosotros” que significa tú y yo, un “nosotros” diferente de ese falso plural que sólo existe por mi presencia y persiste cuando sus componentes disminuyen, aumentan, varían. Uno de esos nosotros que no son más que una extensión de mí. Esa realidad que tú podías, como yo, destruir mejor que yo y lo digo sin ejemplos, a la buena de Dios bajo una forma abstracta porque según mi discurso por más que tienda hacia ti mi amor sé que ese artificio tendrá que naufragar. Yo digo: “Tú”. Comparto las cosas entre tú y yo como si fuera algo banal y aunque a veces dudo sólo así puedo acordarme de tener mi propia razón.”

Le Gai Savoir (1969). Jean Luc Godard.

sábado, 27 de agosto de 2011

simone weil y mogwai (ii)

El arte (no importa cuál) tiene que ver con dos cosas: con el trabajo y con el amor. ¿Correspondencias entre ambas?

El amor, sin embargo, está presente en el arte en la medida que está superado o incluso negado. La lección de la obra de arte: prohibido tocar las cosas hermosas.

(...)

No apropiarse de lo que uno ama..., no cambiar nada..., rechazar el poder...

Weil, Simone. Cuadernos. Trotta. Madrid. 2001 . p. 80.

martes, 28 de junio de 2011

simone weil y mogwai: friend(s) of the night

-Tal vez -el genio no es más que una capacidad para atravesar las "noches oscuras". Los que carecen de él, no bien llegan al borde de la noche oscura, se desaniman y declaran: no puedo; no estoy hecho para esto; no entiendo nada.

(...)

Lo de aceptar un vacío en sí mismo es sobrenatural. ¿Dónde hallar energía para un acto sin contrapartida? La energía ha de venir de otra parte. Y sin embargo, primero ha de producirse un desgarro, algo de índole desesperada: primero ha de producirse un vacío.- Vacío: noche oscura.

(...)

Hay que estar un tiempo sin recompensa, ni natural ni sobenatural. Noche oscura.

Weil, Simone. Cuadernos. Trotta. Madrid. 2001. pp. 290-294.

viernes, 27 de mayo de 2011

the tallest man on earth: paul celan

EN CARRIL SOBRELLOVIDO
el sermoncito de ilusionista del silencio.

Es como si tú pudieras oír,
como si yo te quisiese todavía.

Celan, Paul. Obras completas. Trotta. Madrid. 2002. p. 276

domingo, 22 de mayo de 2011

fragmentos sobre varios viajes al sol

No se lo esperaba el PSOE, no se lo esperaba el PP, no se lo esperaba la televisión, no se los esperaban los bancos o las empresas. No se lo esperaba nadie. Pero porque todos ellos no saben esperar. Sólo desde la soledad nómada se puede esperar lo inimaginable. Y lo inimaginable ha llegado. Ha sucedido lo imprevisible. Y cuando lo inesperado acontece, la historia se fractura, el ritmo del mundo se cuestiona, la posibilidades del devenir colectivo se abren a la imaginación y por fin podemos pensar, sentir, que vamos a vivir juntos. Ya no estamos solos (aunque en cualquier momento podemos volver a la soledad, ahora ya sin miedo).

En la multitud de Sol se da un marco inmejorable para que se produzcan nuevos afectos, para un desear revolucionario. En Les amants réguliers P. Garrel filmaba en bellísimos planos secuencias las barricadas de mayo del 68. Los dos protagonistas se veían, intercambiaban sus miradas, se deseaban... pero ese deseo era intransitivo. Es decir, no se convertía en verbo, no se encarnaba, sino que implicaba un diferimiento de la palabra y del encuentro de los cuerpos: noli me tangere. Reconocimeinto de lo absolutamente otro a través de lo común: comunidad inconfesable.

“Mayo del 68 demostró que, sin proyecto, sin conjuración, podía, en lo repentino de un encuentro feliz, como una fiesta que trastornara las formas sociales admitidas o esperadas, afirmarse (y afirmarse más allá de las formas usuales de la afirmación) la comunicación explosiva, la apertura que le permitía a cada uno, sin distinción de clase, de edad, de sexo o de cultura, congeniar con el primero que pasa, como un ser ya amado, precisamente porque era el familiar-desconcido”. Proyecto sin proyecto, orden desordenado, revolución nada convencional: no se tomo ni la Bastilla, ni el Palacio de Invierno o la Asamblea Nacional. No había un interés utilitario o institucional, más bien se trataba que desde el anonimato se contara una historia: “Cada cual tenía algo que decir, a veces que escribir (en las paredes); ¿qué en suma? eso importaba poco” (Blanchot, Maurice en La comunidad inconfesable).

He ido a Sol. Tanto solo como acompañado. Son dos formas diferentes de estar. Las dos interesantes. Pero si vas acompañado parece que todo el trabajo ya está hecho. Que esto es sólo un punto de llegada. Por eso tengo que reconocer que me gusta ir solo. Alguien escribía en un blog que esa soledad le permitía sentir el anonimato. Estoy de acuerdo. En la soledad se suspenden las normas de reconocimiento que nos permiten sentirnos masa y podemos ser multitud. Esa soledad, que no se me entienda mal, es apertura. Apertura a lo diferente y a lo posible.

He hablado con muchos amigos y amigas de lo que estaba pasando. Varios me han dicho que ésta no era su revolución. Pero creo que se equivocan. Esta no es la revolución de nadie en singular, sino que es el movimiento por el cual ese nadie se articula en plural. Esto es, éste es el devenir colectivo de los nadies, de los Blooms. Sólo suspendiendo nuestras expectativas aparece lo imprevisible y así podemos construir un proyecto común.

Viernes 20 de mayo. Doce de la noche. Se hace el silencio en la plaza. Se construye una ausencia, un vacío. Al pueblo (no al Volk) siempre le falta algo. El pueblo -no nos equivoquemos- es irrepresentable. En otras palabras, la comunidad democrática (¿real?) es una presencia que se pliega en multitud de fisuras, de vacíos. Una presencia como ausencia y una ausencia como presencia. A través de ese intercambio interminable, en ese silencio que se construye, podemos escuchar a los que no están, a los que faltan, y sobre todo, podemos imaginar a aquellos que van a llegar. Esa comunidad siempre por venir, desobrada, por hacer.

http://vimeo.com/24048483

lunes, 14 de marzo de 2011

noches opacas: nacho vegas

Trato de componer mi historia,
y aunque hay partes que podrías ver,
la verdad fue escrita en las sombras,
sucede así una y otra vez.

Cosas que no hay que contar, Nacho Vegas.


muchos de mis pensamientos, experiencias, deseos y afectos de los últimos años han tenido como BSO "el manifiesto desastre". en "todas las canciones hablande mí" se nos dio a ver lo que muchos ya habíamos intuido: que "crujidos" es un tema que habla de la soledad y de las calles de madrid vacías, de madrugada. hace unas semanas se ha editado "la zona sucia". no soy objetivo para valorar el trabajo de nacho vegas; eso sí, puedo decir que por suerte o por desgracia me he vuelto a identificar con sus letras: zonas sucias, oscuras, opacas, nocturnas.


lunes, 7 de febrero de 2011

the dreamer

"desear es dar lo que no se tiene a alguien que no lo quiere"
blanchot, la comunidad inconfesable.


miércoles, 12 de enero de 2011

film socialisme

ayer fui a ver la última película de godard al pequeño cine estudio. me parece difícil, casi imposible, escribir sobre film socialisme: me encontré una película ilegible, fragmentada, nihilista. me fascina como godard filma el mar. el mar como metáfora de la soledad absoluta. del vacío. imposible escribir sobre godard, imposible escribir sobre mí.

"Por eso sin duda es difícil decir algo del cine, ya que tanto allí como aquí, tanto en Serguei Eisenstein como en Jean Renoir, los medios y los fines se confunden siempre, ya que, como diría Malraux, se trata de oír con las orejas el sonido de nuestra propia voz, que tenemos costumbre de oír con la garganta. Bastaría entonces un Nagra o un Telefunken, pero eso no es todo. Es cierto que acabamos por identificar como nuestra la voz que sale del altavoz, lo que no impide que a través de la oreja sea otra cosa, exactamente, los otros, y nos queda entonces algo muy difícil que hacer, escuchar a los otros con la garganta. El doble movimiento que nos proyecta hacia los demás al mismo tiempo que nos devuelve al fondo de nosotros mismos define físicamente al cine."

Godard, Jean Luc en "Mi amigo Pierrot". Nuevos cines, nueva crítica. Paidós. Barcelona. 2006. p. 110.