El arte (no importa cuál) tiene que ver con dos cosas: con el trabajo y con el amor. ¿Correspondencias entre ambas?
El amor, sin embargo, está presente en el arte en la medida que está superado o incluso negado. La lección de la obra de arte: prohibido tocar las cosas hermosas.
(...)
No apropiarse de lo que uno ama..., no cambiar nada..., rechazar el poder...
Weil, Simone. Cuadernos. Trotta. Madrid. 2001 . p. 80.
sábado, 27 de agosto de 2011
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